Los llamaba "necrómanos", es decir, maníacos de la muerte, personas que disfrutan matando. Se los confundía e menudo con necrófilos, los que sienten deseos de copular con cadáveres. [...] la necromanía, es una parafilia; una perversión. [...], las perversiones no son sino distorsiones del deseo sexual que hacen aumentar su intensidad.[...] en el fondo los necrómanos no son enfermos mentales. muy al contrario: están aquejados de una sociopatía, en el sentido de que la suya es una moral distinta a la común. Nada más. Son gente perfectamente normal, y por lo tanto consciente de sus actos, pero con una sexualidad dominada por un vicio terrible. [...] No era un loco, Un vicioso, tal vez, pero no un psicótico.
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3 comentarios:
concuerdo hay gente para todo, aunque me sorprende mas la necrofilia y siempre me ha llamado la atencion...
en cuanto a ser necromano...quien no lo ha sido?
Hola!
Mmmm, sip, supongo que
juventud es sinonimo de gozo,
lucha y placer!... Pero tú tambien
eres joven, asique espero que sigas
tus consejos...
Saludos...
.
Jajaja...
Talvez aún no conosco a un Vampiro de verdad, pero definitivamente Edward me tiene encantada!
Que le puedo decir, he caído a los pies de ese hombre, me gusta y punto.
Me han dicho que Drácula es bueno, talvez lo lea algún día, quien sabe...
Al menos usted volvió a aparecer por mi blog, gracias.
Saludos y cuidese mucho.
.
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